BIBLIOGRAFÍA

Elucubracions

Pilar Abella del Cerro

aquarel·la líquida

6/2022
 

Bibliografia

Confinament o cent-divuit dies

Pilar Abella del Cerro

aquarela sobre paper

Reflexes

Pilar Abella del Cerro

pastel

Iglesia de San Julián y Santa Basilisa

Pilar Abella del Cerro

pastel sobre paper

11/2017

Recés

Pilar Abella del Cerro

pastel sobre paper

Horitzó

Pilar Abella del Cerro

pastel sobre paper

Reseña bibliográfica

Gorriz Abella, Jaume: "Filipinas antes de Filipinas: el archipiélago de San Lázaro en el siglo XVI", Polifemo, Madrid, 2010, 355 páginas, ISBN: 978-84-96813-49-6

La historiografía filipinista española ha mostrado su preferencia, como no podía ser de otra manera, por el período correspondiente a la presencia española en el archipiélago de Filipinas. El acceso a fuentes coloniales en los archivos españoles hizo que los investigadores dedicaran sus esfuerzos a determinadas etapas en detrimento de otras. En este sentido, las Filipinas prehispánicas recibieron un grado menor de atención, de modo que, salvo contadas excepciones (como los trabajos de Luis Ángel Sánchez Gómez y Luis Alonso Álvarez sobre las élites locales, o el ya clásico trabajo de Ana María Prieto Lucena), las sociedades de Filipinas han quedado en manos de investigadores pertenecientes a otras tradiciones investigadoras que se han acercado a la temática desde diferentes perspectivas como la filología, la arqueología, y sobre todo, la etnografía.

Por este motivo, la obra de Jaume Gorriz Abella supone una destacada novedad, ya que se trata de un trabajo con una visión holística de las sociedades filipinas prehispánicas. El autor parte de la premisa de que el concepto actual de Filipinas es una creación de época hispánica, y que los pueblos del archipiélago carecían de un sentido de unidad hasta la llegada de los hombres de Magallanes y de la colonización española. Por ello, el título hace referencia al término empleado en el siglo XVI para referirse al archipiélago (San Lázaro) antes de que el concepto de Filipinas fuese establecido. Con esta idea de partida, realiza un estudio general sobre los pueblos de Filipinas compatibilizándolo con la perspectiva regional que pone de manifiesto las especificidades locales de las poblaciones, el proceso de conquista y de colonización, así como con la inserción del espacio filipino en el contexto histórico asiático, fundamental para la comprensión de los procesos de cambio en las sociedades nativas. De la mano de este objetivo, se recopilan y analizan diferentes fuentes inéditas de referencia para el conocimiento de las comunidades prehispánicas.

 Parte destacada del trabajo de Abella es el acervo documental empleado para su elaboración. Junto con las obras editadas que suponen el cuerpo central de la publicación, especialmente la crónica de Pedro Chirino, el autor recurre a otras fuentes primarias contemporáneas que sirven de contraste con las anteriores. En este sentido, junto al tradicional recurso a las producidas por las instituciones coloniales, las crónicas de la conquista, colonización y evangelización de las Filipinas o la documentación archivística del Archivo General de Indias y de órdenes religiosas; el autor acude, en la medida de lo posible, a las elaboradas por las sociedades nativas que revisan el sesgo del observador occidental. Por otro lado, utiliza el grueso de la historiografía internacional que ha estudiado el sudeste asiático en la época y, en particular, diferentes aspectos y fases en la evolución de las poblaciones de Filipinas.

El libro consta de dos partes bien diferenciadas precedidas de una introducción a la obra en la que el autor repasa y analiza los trabajos que anteriormente han tratado el siglo de la llegada de los españoles. En este estudio, el autor repasa los acercamientos previos, las posibles imprecisiones terminológicas y metodológicas, así como las perspectivas disciplinarias adoptadas en cuanto a técnicas, fuentes y metodología investigadora. La introducción, del mismo modo, contiene una revisión y comentario de crónicas, compilaciones documentales y narraciones contemporáneas referentes a la época trabajada y recogidas en diferentes archivos españoles. 

La primera parte de la obra es una edición crítica de diferentes crónicas y documentos. Estas obras están agrupadas en función de sus autores: Miguel de Luarca, Santiago de Vera y Pedro Chirino. En el caso de Miguel de Luarca, su Tratado de las Yslas Philipinas (1582) que contiene una descripción demográfica, administrativa, política y geográfica de las Filipinas del momento salpicada con datos de tipo etnográfico y económico. Luarca presta especial atención a los “pintados” (visayas) y a las poblaciones islámicas, informándonos de sus costumbres, religión, orden social, prácticas religiosas y funerarias, legislación y formas de gobierno. La obra de Luarca aparece precedida de una biografía del autor y de un ilustrativo contexto histórico, al igual que en el resto de los autores.

En la parte relativa a Santiago de Vera, son recogidas dos cartas signadas por él relativas a la actualidad del archipiélago: carencias materiales y humanas, estado de la evangelización, amenazas a la presencia hispánica y un bosquejo de la situación económica y comercial.

El autor que recibe especial tratamiento por Gorriz Abella es Pedro Chirino, cuya obra es señalada como fuente central de la investigación. Estos trabajos son la "Relación de las islas Filipinas y de lo que en ellas han trabajado los padres de la Compañía de Jesús" y, sobre todo, la "Historia de la provincia de Filipinas de la Compañía de Jesús (1581-1606)", las cuales, al contrario que las anteriores, no están publicadas en el libro. Como muestra del trato excepcional brindado a Pedro Chirino, encontramos un contexto histórico más amplio relativo a los primeros pasos de la evangelización en Extremo Oriente y el escenario general de las misiones de la Compañía de Jesús. El autor recoge una peripecia de la crónica y, lo que es más interesante, un análisis profundo de la misma, atendiendo al interés para el conocimiento del archipiélago prehispánico, influencias, referentes filosóficos y religiosos, fuentes empleadas... 

La segunda parte del libro estudia los pueblos de Filipinas en el siglo XVI, empleando las obras consignadas en la primera parte, especialmente las de Pedro Chirino, así como otras procedentes del AGI y diversos archivos de órdenes religiosas. Esta segunda parte está subdividida en diferentes apartados en función de la vinculación política y étnica de los mismos. En una primera subdivisión, se realiza un resumen demográfico comparativo con otros espacios del sudeste asiático, un estudio de la cultura material repasando los recursos alimenticios, industriales y comerciales disponibles, así como de la estructura económica, la organización social, aspectos religiosos, etc. El resto de esta parte está dedicado a los espacios situados en la órbita del sultanato islámico de Brunei, antiguo dominador de diferentes territorios en las islas. En esta parte, el análisis se centra en los diferentes puntos bajo la órbita bruneana, particularmente Manila y territorios del sur como Mindanao y Sulú, acerca de los cuales hay pequeños apartados consagrados al sistema político, cultura material, sistema de propiedad, organización social, creencias y prácticas religiosas, así como noticias sobre los primeros contactos con los españoles, proceso de conquista y/o sumisión del territorio, grado de dominación efectiva del mismo e inicios de la evangelización. Esta misma estructura es empleada en referencia a los pueblos visayas ajenos a la dominación del sultanato con base en Borneo, con capital interés por las formaciones sociales y políticas de isla de Cebú, aunque sin obviar otras. Por último, trata acerca de otros espacios y culturas minoritarios y que forman parte del complejo mosaico cultural filipino prehispánico. Para finalizar su trabajo, pero no por ello menos interesante sino todo lo contrario, Gorriz Abella reflexiona acerca de la inexistencia de una tradición política unificadora en Filipinas antes de la llegada española, predominando la atomización a causa de las condiciones geográficas y las tradiciones culturales malayas de los pueblos filipinos. Como colofón, el autor delinea una posible clasificación tipológica de las formaciones políticas de las Filipinas prehispánicas de gran interés. 

En definitiva, el libro de Jaume Gorriz Abella supone una interesante novedad en la investigación de las Filipinas prehispánicas. En primer lugar, pone a nuestro alcance fuentes de vital importancia para el conocimiento del contexto histórico previo a la conquista hispana. Unas obras y autores cuya existencia es de sobra conocida por los especialistas, y que demandaban una edición y publicación. Sin embargo, considero que la mayor aportación de este trabajo es presentarnos un cuadro de las formaciones políticas, sociales, étnicas y económicas que trasciende la perspectiva etnográfica adoptada tradicionalmente por los especialistas, y que nos da una idea amplia de la coyuntura histórica sobre la que se implantará (y a la que habrá de adaptarse) el dominio hispánico en Filipinas.

"Naveg@mérica", 16, Jorge García Gimeno (Universidad de Salamanca), Asociación Española de Americanistas, Murcia, 2016

Clarobscur

Pilar Abella del Cerro

pastel sobre paper

5/2015

Eleccions municipals de 1979

Mort el dictador l’any crucial de 1975, i començada la recuperació de les institucions democràtiques a partir de 1977, es van convocar les primeres eleccions municipals el 3 d’abril de 1979, per tal de substituir el règim de poder local caciquil, dominat per una aristocràcia d’afectes al règim franquista, els mèrits de la qual radicaven en el seu grau de complaença i adaptació a les característiques i vicissituds de l’arquitectura de poder que culminava, tan sols culminava, en la figura de Francisco Franco Baamonde, el militar que havia estat capaç d’aglutinar totes les forces de l’antic règim amb les velles i noves oligarquies, per tal de frenar les forces de progrés, de millora social, que havien esclatat, incipients, a les eleccions municipals de 1931.

Val a dir que la substitució no va ser pas absoluta, sinó vagament majoritària, doncs el poder de transmutació dels antics cacics en el nou format d’autoritats democràtiques, va ser considerable i notablement reeixit, i una renovada espècie de “demòcrates de tota la vida” va ocupar molts seients municipals, baix l’ombra de noves sigles polítiques i discursos aparentment nous.

El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) va obtenir la victòria virtual, malgrat la Unión de Centro Democrático va aconseguir més vots, doncs en moltes localitats va unir les seves forces amb el Partido Comunista de España (PCE) o a Catalunya amb el Partit Socialista Unificat de Catalunya, per assolir les majories suficients per governar. Dins del camp de les forces de progrés, és força destacable que el PSOE obtingués només 12.211 regidors, mentre que a totes les eleccions municipals següents fins les de 2011, sempre n’ha assolit més de 20.000. A l’altra cara de la moneda, el Partit Comunista en va tenir 3.753, un volum de poder municipal que mai més ha estat capaç de superar, ni presentant-se amb les seves mateixes sigles o bé transmutant-se en agrupacions d’esquerres més amples. Només es va apropar significativament el 1995, aconseguint-ne 3.497, amb Julio Anguita González al capdavant. Les altres forces, Unión de Centro Democrático i Alianza Popular, van obtenir plegades 32.645 regidors, el 33,94 % del cens, malgrat només van assolir la primera plaça a 20 capitals de província,  mentre els dos grans partits d’esquerres ho van fer a 24.

 A Catalunya, el PSC va vèncer a 27 de les grans ciutats i capitals comarcals, el PSUC a 16, la coalició Convergència i Unió a altres 16, Esquerra Republicana a 1, i altres candidatures a Berga, la Seu d’Urgell i Viella.

Aquest comicis no van despertar l’entusiasme esperat per les forces polítiques, en part per haver-se convocat un mes abans de les legislatives i en un moment de cert empatx en una conjuntura de gran excitació social, doncs representaven la cinquena consulta electoral en 28 mesos. La participació va ser del 61,65% sobre el cens electorals, amb un total de 16.415.695 vots.

A Barcelona, els governs municipals del Partit dels Socialistes de Catalunya s'han anat succeïnt amb més o menys glòria, olímpica i de les altres, fins al punt minvant extrem del període Hereu, quan el seu govern no va defensar Itziar González Virós, regidora de Ciutat Vella fins el 2009. Després de l'únic mandat de les forces de retrocés a la ciutat, que va finalitzar el juny de 2015, la victòria de la formació Barcelona en Comú a les últimes eleccions, obre un nou cicle força il·lusionant, amb un lideratge polític inèdit a la història municipal de Barcelona. Tanmateix, el govern d'Ada Colau Ballano pot esdevenir el tancament d'un cercle de frustracions que va començar aquell 1979.

2/7/2015

JGA

Holocausto en la mar

Tan soberbia, temible, hermosa y cruel, la mar es la tumba de los más desfavorecidos, que huyen de la guerra, la pobreza y la muerte. Refugiados e inmigrantes que no disponen de lo más elemental, que lo han perdido todo. Ahora no puedo mirar la mar sin ver un cementerio. ¡Ella no es la culpable! ¡Es el egoísmo! Aquello que la convierte en un infierno es la maldad para con nuestros semejantes.

texto y acuarela de Pilar Abella del Cerro

Stefan Zweig

Nascut a Viena el 1881, fill d’una família jueva pròspera, Zweig es va criar en un temps que més tard ell mateix descriuria com una edat d'or de la seguretat, l’anomenada Belle Époque, quan la prosperitat d’Occident semblava no tenir aturador i que va concloure bruscament l’estiu del 1914. Amb el seus llibres va assolir grans èxits d’abast internacional, tan en els països de llengua alemanya com en d’altres, i fins i tot va escriure el llibret d’una opera de Richard Strauss, “La dona silenciosa”. Però en el cim del seu èxit literari, tan de crítica com de públic, l'ascens del nazisme va condemnar el seus llibres a la foguera, i el va obligar a un dolorós exili, per primera vegada a Gran Bretanya, a continuació als Estats Units d’Amèrica i, finalment, a Brasil.

Les raons pel ressorgiment de Zweig en aquest moment en particular no són necessàriament obvies, i han provocat moltes especulacions en els cercles literaris. Tot i una certa convencionalitat en l'estructura i el to de les seves narracions, especialment en les de ficció, les seves biografies, molt aclamades en el seu moment, incorporen descripcions sobre el caràcter, les emocions i la motivació que eren inusuals i molt reveladores pel seu temps, i segueixen ressonant avui. No és d'estranyar, doncs Zweig i Sigmund Freud eren amics i admiradors mutus, fins el punt que l’escriptor va pronunciar un panegíric al funeral del seu compatriota i metge.

El renovat interès en Zweig també sembla ser un element de curiositat nostàlgica, de certa melangia, sobretot en el context del centenari de l'esclat de la primera guerra mundial. Així el títol del seu esplèndid llibre de memòries publicat el 1942, "El món d'ahir", i el fet que les seves obres més conegudes transcòrrren en ambients elegants, decadents o sovint desapareguts, com transatlàntics, balnearis alpins o un regiment de cavalleria servint a la frontera de l'imperi dels Habsburg.  Definitivament, no ens podem estar de reproduir un dels seus darrers escrits, molt revelador de la seva existència:

"Abans de sortir de la vida de la meva pròpia voluntat i amb una ment sana, estic impulsat a dur a terme una darrera tasca: Agraeixo al Brasil, aquest país meravellós, que m’hagi donat un descans tan amable i tan hospitalari. Cada dia que vaig aprendre a estimar més aquest país, no reconstruiria la meva vida en qualsevol altre lloc, després que el món de la meva pròpia llengua es va enfonsar i es va perdre per mi, i que la meva pàtria espiritual, Europa, s’ha destruït a si mateixa. Però per començar tot de nou després de seixanta anys, un home requereix poders especials, i el meu propi poder s'ha consumit després d'anys de vagar sense llar. Per tant, prefereixo acabar la meva vida en el moment adequat, en posició vertical, com un home per a qui el treball intel•lectual sempre ha estat la felicitat més pura, i la llibertat personal, la més preciosa de les possessions en aquesta terra. Envio salutacions a tots els meus amics, que ells visquin per veure l'alba després d'aquesta llarga nit. Jo, que sóc més impacient, aniré davant d'ells."

Petrópolis, 22/2/1942

JGA