y preguntando a los circunstantes lo que no veían, decía: ¿Quién es esa señora tan hermosa? Premiando sin duda nuestra señora tan adulta fe, en cinco años de estudio en ella, con el regalo de su vista, en la ocasión de más dolor y sentimiento, para templarlo con sus gloriosos ojos". ("Historia de Mindanao y Joló", Francisco Combés, 1667 [1897]: 524)

      ― o ―
      Wire transfer
      Cart is empty